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Nutriendo al cultivo desde la semilla 

El suelo es un organismo que necesita un adecuado equilibrio en su composición. Un suelo sano, junto a la nutrición localizada en la semilla, generan un ambiente favorable que estimula el desarrollo radicular y una correcta implantación, fortaleciendo el cultivo ante situaciones de estrés abiótico.

La sequía está castigando a los cultivos y demorando la siembra de gruesa, generando una disminución en la superficie sembrada, así como un ascenso de sales por capilaridad y un impacto negativo en la producción. Existen herramientas que pueden ayudar al productor, como los correctores de suelos que favorecen el lavado de sales en suelos salino-sódicos, logrando una mejora de la implantación en lotes con ciertas dificultades, como el MIST TPS 78® que es una dispersión de nanopartículas de azufre y calcio de alta pureza que mejora la estructura del suelo. Adicionalmente, la utilización de vivificantes de semillas como el MIST-VG® o el MIST-VL® aportan una tecnología innovadora con macro y micronutrientes, beneficiando el desarrollo radicular temprano, generando una zona de confort en torno a la semilla, disminuyendo mermas en el rendimiento potencial. 


Aportando nutrientes desde la semilla

Ante un escenario de estrés abiótico, por falta hídrica y/o calor extremo, se recomienda inocular las semillas y potenciarlas con la aplicación de vivificantes. Tratar las semillas con vivificantes surge como una alternativa para garantizar al cultivo los nutrientes esenciales para su desarrollo inicial, además de estimular el crecimiento temprano para lograr una mejor implantación. El tratamiento de semilla con vivificante, no solo nutre a la plántula desde la germinación, sino que también aísla la semilla del sodio presente.

MIST-VG® es una suspensión mineral que contiene los elementos: Nitrógeno, Azufre, Calcio, Magnesio, Hierro y Silicio. Estos minerales aseguran una zona de confort en la rizosfera y permiten la máxima expresión del PG de la semilla, favoreciendo el desarrollo de la plántula. 

MIST-VL® es un vivificante para semillas recomendado para leguminosas, compuesto por nanopartículas minerales de azufre, calcio, silicio, molibdeno, manganeso, boro y cobalto. Entre sus efectos benéficos se encuentran la rápida asimilación del Calcio, el cual mejora el transporte del resto de los nutrientes, un efecto regulador del pH y la saturación de bases localmente, un aporte de Azufre y Calcio de rápida disponibilidad, y la formación de un ambiente que permita la máxima expresión del poder germinativo y desarrollo de la plántula.


El resultado final es un incremento en la producción, además de favorecer el confort de otros organismos fijadores y solubilizadores presentes en el suelo. El tratamiento de semilla con MIST-VL® le ofrece a la semilla los nutrientes y las condiciones necesarias para que empiece a nodular, aumentando la cantidad de nódulos, favoreciendo la interacción de estos con el suelo.


Los vivificantes de alta tecnología que incorporan nanominerales se pueden aplicar, junto con los inoculantes, a una dosis de 500cm³ cada 100 kilos de semilla y se deben diluir con agua (a razón de 0.5 Lt. de agua por cada litro de vivificante).

En un ensayo realizado en San Francisco de Bellocq, en Buenos Aires, se evaluó el impacto del MIST TPS 78® como herramienta en la recuperación de un suelo degradado, junto al uso del MIST-VG® como vivificante de semilla en cebada. Los resultados demostraron una mejor implantación y un incremento en el desarrollo radicular, lo que generó un mayor rendimiento final.

Mejorando las condiciones del suelo para la semilla

Cuando un suelo está en equilibrio, se encuentra en condiciones adecuadas para una buena producción biológica. Si este equilibrio se rompe, la evolución natural se modifica y se desarrollan una serie de procesos que tienden a la disminución de la calidad del suelo y por consiguiente, a su degradación.

En nuestro país encontramos una gran presencia de suelos sódicos y/o salinos afectados por sales que limitan el crecimiento de los cultivos, reduciendo la capacidad para absorber agua y limitando la disponibilidad de macro y micronutrientes.

Ante esta situación, la corrección de suelos es un factor clave que no debe ser dejado de lado, más sabiendo que hoy, con tecnología innovadora, suelos de baja o nula productividad logran recuperarse. 

Favorecer la sinergia entre el suelo y la semilla, puede garantizar cultivos sanos que logren expresar todo su potencial genético, dentro de las posibilidades del ambiente sembrado.


Actualmente y gracias a los avances de la tecnología, existen productos innovadores de mayor eficacia comprobada que son una solución más práctica frente a los correctores de suelo convencionales. La nanotecnología permite una eficiente recuperación de suelos mediante aplicaciones realizadas a muy bajas dosis, en relación con los productos tradicionales. Las soluciones líquidas favorecen el aumento de la velocidad de reacción, incrementando el accionar del calcio y del azufre en el complejo de intercambio del suelo.


El MIST TPS 78® es una dispersión de nanopartículas minerales de alta pureza, cuya composición básica contiene azufre y calcio a la cual se le adiciona en su formulación azufre elemental. Esta combinación es recomendada para desplazar sodio y sales del complejo de intercambio del suelo, logrando así, a largo plazo, una mejora en la estructura del mismo; reduciendo problemas de compactación y encostrado superficial. Desde su presentación en Bag in Box de 15 litros, que permite armar un pallet estándar de 56 unidades (840 litros), fácilmente transportable en camioneta y cuyo rendimiento permitirá cubrir hasta 280 hectáreas.


Por otro lado, la facilidad y bajas dosis de aplicación ofrecen grandes ventajas operativas. Es un producto que logra un efecto eficiente de recuperación de suelos con aplicaciones que reemplazan las grandes cantidades de material a granel.


Otro ensayo realizado en la localidad de Gaiman, Chubut, demostró la eficiencia del MIST TPS 78® en la recuperación de un suelo degradado, ajustando los parámetros químicos del suelo. Fue notable el ajuste del pH y la baja del sodio.

Debemos entender la agricultura con un pensamiento integral. El suelo debe tener la estructura y la capacidad de permitir el máximo desarrollo posible al cultivo. Un correcto manejo integral del suelo es, sin duda, uno de los principales factores para lograr aumentar la productividad por hectárea. El MIST TPS 78® es un producto recomendado para suelos afectados por problemas de salinidad y/o sodicidad, mejorando la disponibilidad y absorción de nutrientes, potenciando la micorrización y población de microorganismos, y aumentando los rendimientos de los cultivos y/o los Kg de MS.  del pastizal natural o pastura implantada por hectárea.